Este país, una de las pocas naciones del mundo que no cuentan con ejército, es reconocido por su vegetación salvaje, sus playas y los múltiples volcanes que se dispersan por sus tierras.
No se puede elegir un trío más ganador si lo que busca es un lugar donde la naturaleza salga a su encuentro y los animales se conviertan en sus compañeros de aventura.
Contratar un coche de alquiler es la mejor opción para recorrer los 51 mil kilómetros cuadrados de Costa Rica y en tan solo 15 días, será capaz de abordar todos los encantos de un país donde la biodiversidad es tal que incluso se pueden encontrar en sus terrenos ejemplos de bosques tropicales secos, espacios naturales tan singulares que no son los más frecuentes en el resto de países centroamericanos.

Para que no deje de desfrutar este país costarricense, existen viajes programados donde se deja total libertad al aventurero para que disfrute del día a su antojo y, únicamente, se tiene predefinido el lugar en el que se pernoctará durante la noche.
Los volcanes también forman parte de la esencia más pura del país, siendo el más activo de ellos el que se localiza en la zona de Arenal.
El volcán homónimo cuya última erupción se registró en 2010 está ubicado en un parque nacional que se ofrece al visitante como el lugar perfecto para la práctica de las actividades multiaventura, pues en su extensión hay desde tirolinas hasta rutas para cabalgar a caballo, pasando por visitas naturales a su catarata de la Fortuna, las aguas termales del Tabacón o el río Celeste cuyo nombre no deja lugar a dudas del color de sus aguas.

Las familias quizás encuentren más atractivo otro destino, como es el Parque Nacional Manuel Antonio, donde se emplazan algunas de las playas más bonitas del país y donde resulta ideal la práctica de múltiples actividades acuáticas.