El próximo miércoles 2 agosto el gran final del éxito NCIS: Los Ángeles, la serie sobre el alto riesgo de una división de NCIS que se encarga de detener a criminales peligrosos y esquivos, que representan una amenaza para la seguridad de la nación norteamericana, con un explosivo último episodio que combina acción, drama pero también alegrías y celebraciones dentro del equipo.

En este último episodio, sigue el suspenso de la primera parte de este capítulo, con un final de serie tan perfecto solo como un drama que la serie puede ofrecer.

El equipo de NCIS continúa el caso con Departamento de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos y las armas de grado militar robadas, además, Callen (Chris O’Donnell) y Anna (Bar Paly) se casan en una ceremonia improvisada a la que asiste el resto del equipo, excepto Hetty (Linda Hunt), quien les envía una nota de felicitación.

Por otro lado, Kensi (Daniela Ruah) se enferma luego de haber comido un alimento en mal estado y, tras este malestar y dolores de cabeza que empieza a padecer, se hace estudios completos que le traerán un importante anuncio.

Al asumir identidades falsas y utilizar la tecnología más avanzada, este equipo de agentes altamente capacitados liderados por G. Callen (Chris O’Donnell) y Sam Hanna (LL Cool J), se infiltra a fondo, arriesgando sus vidas en el campo para acabar con sus objetivos.

Los agentes regresarán en esta temporada 14 para algunas asignaciones de alto riesgo y seguir la acción la Oficina de Proyectos Especiales, una unidad de élite del Servicio de Investigación Criminal Naval que maneja misiones encubiertas y amenazas a la seguridad de los Estados Unidos.

“NCIS: Los Ángeles fue un regalo increíble”, declaró Chris O’ Donell. “Es un negocio difícil en el que estamos y he sido muy afortunado de tener mucho éxito. Tener un programa que se filmó en Los Ángeles y duró 14 años está más allá de mis sueños más increíbles porque permitió que mis cinco hijos estuvieran en la misma escuela y no se perdieran lo que hacían sus amigos. Tenía que estar en casa, aunque trabajaba muchas horas, para verlos por la mañana o por la noche, una de los das. Fue simplemente lo mejor”, resaltó el actor.

Por su parte, LL Cool J reflexionó: “Este es uno de los programas de mayor duración en la historia de la televisión. Creo que la experiencia fue increíble porque maduras, porque creces como ser humano, porque haces nuevos amigos, nuevas relaciones. Creo que lo único que extrañaré realmente es el trabajo diario con todos los hombres y mujeres, todas las personas en el set. Fueron tantas relaciones. Estamos hablando de 14 años, así que he visto a personas tener hijos, bebés que después van a la universidad, he visto matrimonios, he visto todo lo demás, y extrañaré trabajar día a día con personas que se hicieron amigas”, concluyó.

NCIS: Los Ángeles, primer spin-off de la serie NCIS, se estrenó para toda América Latina por A&E en el año 2009 y la serie se convirtió en el más largo de la historia, con un total de 322 episodios.