El Buki presento su concierto denominado Eternamente Agradecido, en una velada llena de nostalgia y alegría en el Estadio Tres de Marzo, quien arribo al escenario como es habitual con una elegante vestimenta, y su inconfundible melena ondulada.
La presentación en Zapopan, Jalisco, ofreció a los seguidores una fiesta llena de música romántica, nostalgia y baile, acompañado por su banda y un grupo de coristas el cantautor michoacano arrancó su presentación con el tema Se va Muriendo mi Alma, y continuar con Y Ahora Te Vas.
En un momento Solís envió sus saludos a todos sus fanáticos, desde los contemporáneos cincuentones hasta los jóvenes románticos, además de demostrar su alegría por tocar esta noche en Guadalajara.
Dios Bendiga Nuestro Amor y Bajo Los Ojos de Dios fueron las canciones que le siguieron a su show, además de que Marco demostró sus excelentes pasos de baile en compañía de sus bailarinas, levantando al respetable a bailar con él.
Temas como Morenita, Cuando Te Acuerdes de Mí y O Me Voy O Te Vas, las cuales con tan solo escuchar los primeros acordes, muchos de los asistentes se emocionaron y pusieron de pie y esa continúo siendo la atmósfera por las siguientes canciones.
“Esta noche es maravillosa”, fue una de las primeras palabras que el cantante dirigió a su público, “cada vez que hay clima bueno hay que agradecer, cómo aquí en Guadalajara”.
Las baladas llenaron de emoción a los asistentes y entre las canciones más coreadas estuvieron, Acepto mi derrota y Si no te hubieras ido.
En la velada no pudieron faltar temas clásicos como Viva el amor y El Celoso, en las cuales Marco Antonio Solís demostró sus aptitudes de baile interpretando algunas coreografías con sus bailarinas.
Tal como el nombre de su gira lo dice, Eternamente Agradecido, a lo largo de la noche el cantante expresó en varias ocasiones su gratitud a sus fans, continuando con su espectáculo, El Buki interpreto La Venia Bendita, teniendo como respuesta del público una euforia total.
Los asistentes a este gran evento pudieron disfrutar de una montaña rusa de emociones, desde temas movidos hasta melancólicos, Marco Antonio Solís complació tanto a corazones enamorados como a almas heridas durante toda su interpretación.