En una gran velada como siempre garantía en Lila Downs quien en una velada de canto apasionado y baile fue lo que vivió el público tapatío en el Teatro Diana, donde presentó su nuevo álbum La Sánchez.

El Son del Chile Frito dio apertura al espectáculo y comenzó a hacer vibrar a los fanáticos que gritaron emocionados ante la salida de la cantante oaxaqueña.

“Hermoso público de Guadalajara, les traemos una ofrenda musical de diferentes regiones algunas rancheras, algunas cumbias, algunas chilenas un homenaje al mezcal y al mole. Presentándoles La Sánchez, también; pero antes queremos bailar cumbia”, así dedicó estas palabras al público asistente y dar paso a La Campanera.

Con un escenario lleno de colorido y un público cada vez más entregado, Lila Downs presentó La Sánchez, su proyecto más reciente, con el que hace homenaje a su madre y sus raíces mexicanas.

Ataviada con un sombrero norteño y largas trenzas, la artista se entregó ante un público que no paraba de aplaudir y gritarle muestras de cariño.

El teatro vibró al escuchar La Cigarra, y a partir de ese momento la mayoría del público permaneció de pie para acompañar a la cantante con baile, palmas y vítores.

Durante el concierto se hizo presente el tradicional homenaje a José Alfredo Jiménez. Honró la herencia musical que el guanajuatense dejó en nuestro país, para dar paso a la interpretación de El Último Trago, ante un público que cantó de principio a fin.

Con un gran recorrido musical Lila Downs, aprovechó para dar las gracias a cada uno de los músicos que la acompañan, y despedirse sin antes expresar su cariño a los asistentes.