En esta ocasión nuestro viaje será al sótano del Monumento a la Revolución, lugar en donde está ubicado este Museo Nacional de la Revolución, símbolo arquitectónico de la ciudad de México que alberga las criptas de personajes nacionales como Villa, Madero, Carranza y Cárdenas.
Este proyecto de instalación del museo fue en 1936 y fue elaborado, al igual que los planos del monumento, por el arquitecto Carlos Obregón Santacilia, sin embargo, por motivos económicos, el museo no fue realizado sino hasta 1986, bajo la supervisión de la historiadora Eugenia Meyer y el arquitecto y museógrafo Jorge Bribiesca.
Y su apertura fue el 20 de noviembre del mismo año y fue reinaugurado, después de tres meses de remodelación, el 20 de noviembre de 2002, en donde destacan en sus objetivos es consolidarse como un instrumento didáctico, auxiliar en la enseñanza de la historia de México, que visualice los conocimientos impartidos en los diversos niveles educativos.
De esta manera y bajo toneladas de concreto, a los pies del Monumento a la Revolución, y en los sótanos de lo que alguna vez se pensó sería el gran Palacio Legislativo del gobierno de Porfirio Díaz, se ubica el Museo Nacional de la Revolución, un espacio de vanguardia museística dedicado a la divulgación del proceso histórico de la Revolución Mexicana, lugar que cuenta con ocho salas permanentes y una sala de exposición temporal.